manzanas caidas

domingo, 28 de febrero de 2021

 Yo llegué aquí 

antes de que el viento 

te trajera en las nubes 

y me senté 

en el patio 

a esperar 

que cayeras 

yo pensé 

en todas la veces 

que caíste 

sobre nosotros 

y también caí 

de la misma manera

mojando 

las manos 

de todos 

los que escribimos 

cuando se nos caen 

adentro 

tus gotas

sábado, 27 de febrero de 2021

Es curioso como los poemas 

se van llenando 

de pinceles 

y soledad.

Quizás no tendría 

tantos colores vacíos

en mi lienzo 

si me hubieras elegido.

Las canciones 
en las almohadas de las noches 
también parecen colgar del techo

viernes, 26 de febrero de 2021

Por favor 

quiero vivir 

o ahogarme

en la taza de aquella tarde.

 El viento 

entre los árboles  

parece cantos 

de madera vieja.

Suena 

a pájaros 

que parecieran bailar

entre las ramas 

y juraban

permanecer 

en el tiempo.

jueves, 25 de febrero de 2021

 yo no sé 

que hacés

en medio 

de las canciones nuevas

si te vas todos los años 

y no volves todos los días

yo no sé 

que hacer 

con tantas sombras

detrás de las cortinas.

miércoles, 24 de febrero de 2021

 Cada nacimiento de pluma 

duele 

y el corazón de gorrión 

se te hace más chico 

en cada salto 


no todos los vuelos 

son hasta casa

lunes, 22 de febrero de 2021

 Había 

algo de la muerte 

entre aquellas letras 

que intentaban nombrarla

sábado, 20 de febrero de 2021

 Los llantos 

sonaban 

a cantos de fantasmas 

en medio del cuarto

por favor 

que alguien apague

los miedos 

de mi cabeza

viernes, 19 de febrero de 2021

 Son muchos los pedazos 

de mí 

que voy encontrando 

en las canciones viejas 

son muchos años 

en los que se han quedado mudas

ante el temido 

final.

jueves, 18 de febrero de 2021

 Camino a casa 

en medio de la ciudad 


No hay nadie 

que pueda silenciar 

las lunas 

chocando en las paredes 

de los aerosoles 

que llevo en la mochila 


Quizás,

los gatos en los techos 

hacen apuestas 

de en cuántos pedazos 

se rompió mi corazón 


Y se pelean 

y sangran 

y pierden a quienes aman.

lunes, 15 de febrero de 2021

domingo, 14 de febrero de 2021

I


Ya no es mágico el mundo. Te han dejado.

Ya no compartirás la clara luna

ni los lentos jardines. Ya no hay una

luna que no sea espejo del pasado,


cristal de soledad, sol de agonías.

Adiós las mutuas manos y las sienes

que acercaba el amor. Hoy sólo tienes

la fiel memoria y los desiertos días.


Nadie pierde (repites vanamente)

sino lo que no tiene y no ha tenido

nunca, pero no basta ser valiente


para aprender el arte del olvido.

Un símbolo, una rosa, te desgarra

y te puede matar una guitarra.


II


Ya no seré feliz. Tal vez no importa.

Hay tantas otras cosas en el mundo;

un instante cualquiera es más profundo

y diverso que el mar. La vida es corta


y aunque las horas son tan largas, una

oscura maravilla nos acecha,

la muerte, ese otro mar, esa otra flecha

que nos libra del sol y de la luna


y del amor. La dicha que me diste

y me quitaste debe ser borrada;

lo que era todo tiene que ser nada.


Sólo que me queda el goce de estar triste,

esa vana costumbre que me inclina

al Sur, a cierta puerta, a cierta esquina.


Jorge Luis Borges

sábado, 13 de febrero de 2021

Tu voz se va escribiendo 

en las nervaduras de las hojas 

de los eucaliptos 

que me llaman desde lo alto 

y en la lejanía veo 

como el viento 

te arranca de mí.

Y el miedo vuelve 

y me hace 

raíces 

en el suelo.

viernes, 12 de febrero de 2021

 Suena el celular como si cantaras en mi oído muy despacio, no quiero atender, sé qué es la última vez que vamos a hablar y me desarmo por dentro.

La puerta abierta que da al balcón, trae un pájaro gritando, me despierto, y el vacío entre mis manos sigue creciendo en el sonido de las despedidas son voz.

jueves, 11 de febrero de 2021

A las teclas del piano

de las tardes en la facultad de artes

le pregunté si alguna vez 

iba a dejar de llover

en noviembre.

Las tazas de té

Nunca más fueron las mismas

Después de tus canciones

miércoles, 10 de febrero de 2021

 

I

No voy a hablar del llanto contenido en mis ojos desbordando en las nubes de la ciudad, ni de la desolación de mis calles, aún cuando viven inundadas de recuerdos aunque Santiago no esté, ni tampoco de la angustia que entraba por la ventana cuando todo era gris, y mucho menos voy contarles de la esperanza que intentaba asfixiar con muy buenas razones.


II

Ya sé cómo se sobrevive a éste sentimiento miserable, ya sé dónde tengo que ir, que es lo que debo hacer, a dónde dirigir mi energía, ya sé, juro que lo sé.


III

Yo caí, nuevamente, hasta el fondo del pozo, desde donde escribo y me acuerdo de Burundi.





martes, 2 de febrero de 2021

Llovió todos los días.

 - yo ya no siento lo mismo

Y la tormenta de sus ojos era tan grande que se inundó la ciudad el 1ero de enero del 2015. 

Mi mamá había salido en el auto, me contó que se tuvo que subir a la vereda cuando iba por la roca, y que el agua castigaba con tanta fuerza que entró hasta en el baúl. 

Y sí, yo pensé en esa chica escuchando romperse el mundo en una simple frase, y sí, la vi ser tormenta, con el trueno en los ojos, con el agua en las manos, con todas las personas metidas en sí, con la soledad de las calles desiertas.

Mi mamá me contó que ese día se había asustado tanto, que solo rogaba a dios que pare, ella cree en esas cosas, yo no estoy segura de creer en nada. 

Volví a esa imagen de ella llorando, aún en los brazos de su ejecutor, temblando, más triste, más sola.

-te voy a extrañar flaquita linda, tenés que ser fuerte, yo voy a estar aunque no me veas.

Mi mamá me contó una vez que esa chica soñaba con manejar el clima, que cuando ella saliera de casa, saliera el sol, y que cuando ella esté triste, el día sea gris, y cuando llore que llueva, tonterías de ese estilo, que recuerdo ahora porque ese día se le cumplió, pobre mina.

Mi prima ese día se quedó en su casa, no tuvo ninguna anécdota interesante para contar, solo que se le lavó la vereda, y las huellas del matambre al verdeo que se le había caído la noche anterior cuando iba a la casa de mi mamá por el festejo, y sí... se lo comieron con piedritas. 

La mujer triste se quedó dormida abrazando a ese extraño, cuando despertó fue hasta el baño, seguía lloviendo en todos lados. Miró la imagen en el espejo, se preguntó si iba a poder con tanta agua, siguió lloviendo un poco más.

-aunque te pese yo fui tu mejor novia

-Si, ese título no te lo saca nadie, yo debo ser el más gil del mundo para dejarte ir

-yo lo sospeche siempre igual

-te amo

- no seas pelotudo. 

Mi mamá dice que son 4 años no cumplidos, a mi me suena a la profecía del no nacido, no sé, asi de boluda soy. Mi prima dice que el matambre estaba rico igual.